Guardalas siempre de pie, una al lado de otra almacenadas por color. Así es más fácil encontrar lo que se quiera usar.
Nunca poner una sobre otra, eso puede arrugarlas t arruinar los tejidos.
Si tenes más carteras que espacio en el placard para guardarlas, pone una dentro de otra, de mayor a menor.
Nunca colgarlas. A menos que sea la que estas usando en ese momento. Tener colgadas las carteras por mucho tiempo daña las asas y la estructura de la cartera.
No guardarlas en cajas plásticas ni de cartón. Estos materiales impiden la ventilación, acumulan humedad y hacen que el moho aparezca.
Para protegerlas del polvo o de los arañones, coloquelas en bolsas de tela con visor. La tela permite la ventilación y el visor facilita la vista.